En el segundo semestre del año el Programa Alimentario Nutricional Escolar (PANE) beneficiará a otros 10.000 alumnos de toda la provincia, que recibirán el almuerzo en su escuela. En los próximos meses el programa se abocará principalmente a las instituciones de localidades y parajes del interior, muchas de las cuales no contaban con comedor escolar tras la pandemia.
En algunas de esas instituciones rurales, los proveedores entregan los insumos directamente a las escuelas, donde el personal capacitado en manipulación de alimentos preparará las comidas. Además, fueron capacitados bajo las normas establecidas por el ministerio de Educación y siguen un estricto diagrama de alimentos supervisado por la dirección de Comunidad Educativa del PANE.
Durante el invierno, los menús incluyen comidas como guiso, carbonada, polenta, pastel de pollo y tarta de verdura, milanesas, empanadas de verdura y jamón y queso, con opciones ocasionales de pizza. Las comidas son elegidas por su capacidad de proporcionar una nutrición adecuada y sustentable.
“El Programa Alimentario Nutricional Escolar continuará con un incremento gradual de chicos: 4.000 alumnos en julio, 3.000 en agosto y 3.000 en septiembre. Con estos esfuerzos se espera que alrededor de 53.000 chicos en toda la provincia reciban su almuerzo o merienda en la escuela para fin de año”, precisó Laura Capaldo, la subdirectora de PANE.
Estos son los establecimientos educativos en donde se lleva adelante el programa desde esta semana: