Abigail Priscila Villega estaba prófuga desde que el Juzgado Federal ordenó los allanamientos el 21 de mayo pasado, los cuales se hicieron en Villa Mercedes, en la Villa de Merlo y en Buenos Aires para desbaratar dos bandas narcos que vendían droga en San Luis. Es cuñada de Diego “El Gaucho” Funes (líder de la organización), hermana de Katherina Villega, esposa de él.
Esta semana, “Abi” se presentó y pidió la eximición de prisión porque transita un embarazo de 7 meses, que es de riesgo, y debe realizarse permanentes controles y medidas de cuidado que “no son compatibles con el encierro carcelario”. Aportó para esto los certificados médicos que lo acreditan.
El fiscal Federal, Danilo Miocevic no se opuso, ya que la ley la resguarda porque está a punto de dar a luz a un bebé. El art. 10 inc."f" CP, cdte con los arts. 314 CPPN y 32 Ley 24660 prevén la prisión domiciliaria para “la madre de un niño menor de cinco años”.
Bajo esto mismo, también accedió al beneficio María del Carmen Olariaga, también cuñada del cabecilla. Ella es pareja de Ángel Funes.
Según la investigación, Abigaíl Villega fue una de las integrantes más relevantes de la tercera línea de distribución. Tenía a cargo una boca de expendio (a revendedores y consumidores) sobre calle Ministro Berrondo al 936, en el barrio Eva Perón II. En la causa es señalada como uno de los puntos de distribución más importantes de la organización. Al lugar lo denominaban “Casa quemada”. Está involucrado su pareja, Mateo Lescano. Los dos vivían ahí con sus hijos.
En el orden de los roles, ella era una persona de mucha confianza para “El Gaucho”, ya que no solo se encargaba de la distribución de estupefacientes, sino también de la recaudación del dinero. Se verificó que recibió transferencias de $58.199.037 por parte de Héctor “El Oso” Frías, uno de los revendedores importantes (administraba puntos de venta) que cayó a la cárcel 6 meses antes.
Olariaga también estuvo prófuga hasta el martes de la semana pasada. Para evitar que no la manden a la cárcel fundamentó que tiene tres hijos menores, uno de un año que está todavía en tiempo de lactancia. Expuso el compromiso de no eludir la acción de la Justicia y el arraigo en la ciudad.
Ella y su pareja están acusados de comercializar y distribuir la cocaína dentro de la ciudad de Villa Mercedes, puntualmente en el barrio Eva Perón II. La Policía allanó muchas veces su casa y siempre encontró drogas. En los últimos cuatro años (desde que comenzó a ser investigada) no se le conoció ningún trabajo lícito a Olariaga.