En un acto cargado de polémica, el candidato Jorge “Gato” Fernández volvió a dejar en claro que su campaña está íntimamente ligada a los intereses del rodriguezsaismo. Frente a militantes y dirigentes locales, Fernández exclamó: “Tenemos que ganar Villa Mercedes para reivindicar a Anabella”, en referencia a Anabella Lucero, exfuncionaria investigada por actos de corrupción en la Casa de la Música.
La frase no pasó desapercibida. Lucero enfrenta cuestionamientos judiciales junto a un numeroso grupo de exfuncionarios del exgobernador Alberto Rodríguez Saá, quien hoy respalda abiertamente la candidatura de Fernández.
La mención desató un fuerte revuelo político: mientras la oposición denuncia que el oficialismo busca “blanquear” a dirigentes sospechados de corrupción, los seguidores del “Gato” aplaudieron el gesto como una muestra de lealtad hacia la estructura que dominó San Luis durante décadas.
El escenario en Villa Mercedes se calienta: para muchos, la ciudad se ha transformado en el epicentro electoral del rodriguezsaismo. La Casa de la Música, símbolo cultural de la gestión pasada, hoy aparece en el ojo de la tormenta judicial y política.
La pregunta que queda flotando es si la ciudadanía avalará este intento de reivindicación o si, por el contrario, castigará en las urnas la cercanía del candidato con figuras bajo investigación.