“Estamos muy atentos a lo de Buena Esperanza, y se está investigando”, respondió el gobernador Claudio Poggi esta mañana cuando fue consultado por los periodistas, a la salida de la Escuela “Tomás Jofré” donde inauguró una salita de 3 años.

Aunque de manera oficial se comunicó este miércoles que los síntomas que presentaron los alumnos del Colegio “Luisa Fantini de Cortes Aparicio” no estaban relacionados a una intoxicación de alimentos, ni tampoco al monóxido de carbono, familiares de los estudiantes ingresaron a la institución para manifestarse y hubo momentos de tensión.

“Vamos a hacer las denuncias del caso porque no se puede entrar a atropellar e invadir una escuela, cuando la escuela no tiene nada que ver. El que entra a una escuela, padre que entra a la escuela y rompe, paga”, sostuvo.

Dejó en claro que los problemas de salud que manifestaron los alumnos “no tienen que ver con el PANE ni con el gas de la escuela”.

Los síntomas que fueron reportados incluían dolor de cabeza, hormigueo en manos y pies, angustia, llanto, dolor estomacal y dificultad respiratoria.

En las últimas horas y a partir de la información que habrían vertido algunos estudiantes, se busca determinar si habrían bebido alguna sustancia mezclada con agua, la que podría haber sido la causa de las descomposturas y por lo cual fueron atendidos de inmediato por el sistema de salud.

Por último, Poggi dijo que también están con el intendente de Luján y funcionarios del PANE la situación que se presentó en esa localidad.