El funcionario del gobierno de San Luis, director de la Villa Deportiva se quedará con una fuerte inversión en su club, producto de fondos públicos, algo que no lograron otras instituciones mucho más antiguas de la provincia, con mayor cantidad de deportes y actividades, como de niños y adultos que se forman en los lugares.

El cartel de ejecución de obra dice que son $ 84.426.289,59 por una cancha de fútbol sintética e iluminación que le otorgo el hijo del gobernador saliente a Funes, aunque el Diario de la familia de Rodríguez Saá asegura que fueron 90 millones de inversión.

El predio fue inaugurado antes de las elecciones del 11 de junio y sirvió como espacio para que se pasearan los candidatos oficialistas, incluso el mismo Funes era candidato a intendente por la ciudad Capital, y que con fondos de los sanluiseños, le sirvió para lanzar prácticamente su candidatura tal cual lo hizo con la Villa Deportiva San Luis, aunque después perdió en las urnas con Gastón Hissa.

Funes tuvo “la suerte” de que le saliera esa posibilidad, que con plata de los sanluiseños le hicieran esta obra, cosa que no ocurrió con otros clubes y fundaciones que rogaron en Deporte construcciones como estas, pero sometidos al “este sí, este no” de Cinta Ramírez se quedaron sin esa posibilidad.

Lo que cuesta creer es el monto final de la obra, que al conocer la cancha de fútbol que hicieron, comparadas con obras privadas de la misma envergadura consultadas por Zbol. La de la Fundación de Funes es muy abultada para lo que se conoce del lugar.

Por lo pronto se podría decir que más allá de la inflación que existe en el país, hacer la obra que se hizo el Gobierno en el predio de la familia Funes es mucho más económico hacerla de manera privada.