Después de inaugurar la última etapa de la obra de gas natural en el barrio 1010 Viviendas, el gobernador Claudio Poggi se trasladó hasta la Universidad Provincial de Oficios “Eva Perón”, y acompañó a los nuevos egresados. “Los felicito porque esto es un gran logro en sus vidas. Es una etapa la que están concluyendo, y quizás van a continuar con otras etapas de aprendizaje o no, pero esto que hoy concluyen es un gran logro y los éxitos o los logros siempre cuestan esfuerzos”, les transmitió este jueves por la tarde en la Nave Técnica donde 874 estudiantes recibieron sus diplomas. Asistió junto al intendente Maximiliano Frontera; funcionarios provinciales, municipales y legisladores.

“Han invertido en ustedes, han incorporado conocimiento y eso no se los saca nadie, es un capital propio así que sigan por este camino, sigan soñando y sigan trabajando para concretar los sueños, nadie sueña por uno, hay que soñar, y ponerse un norte. Puede haber traspiés, caídas como en la vida, pero lo importante es levantarse y seguir. Lo único imposible es lo que no se intenta”, agregó.

En Tornería se egresaron 23 alumnos; en Robótica 28  y en Cocina 45. Como electricistas fueron 92; como soldadores 96 y en Carpintería en MDF 75. En Estilismo Integral 78; como Secretario Administrativo 84, y uno como mecánico. Fueron 26 en Energías Renovables; 7 sanitaristas; 8 en Obras Edilicias y 15 en Construcción en Seco. Como Operador Logístico 18; en Maquinaria Agrícola 19; en Ventas y Estrategias Comercial 21; y 22 gasistas. En Impresión en 3D, 24; en Electrónica Industrial 11; en Reparación de Electrodomésticos 19 y en Automatización 39. Además, 44 en Producción Digital; y 47 en Panadería.

También 17 egresados recibieron reconocimientos por haber participado en el Programa Upro-Impulsa que está relacionado a pasantías e inserción laboral.

Poggi acompañó el acto de colación de la UPrO.

Un video de nueve minutos resumió cómo fueron los 24 meses de gestión que está a cargo Rudy Cámera. En primer lugar el directivo destacó “el trabajo de todo el equipo que integra la UPrO, que ha sido muy intenso en todos los meses”.

“En el primer año acomodamos toda la universidad y los instructores, a quienes quiero hacer una mención especial, nos acompañaron durante todo el proceso de reconstrucción, cuando iniciamos la gestión, y luego cuando modificamos los planes de estudios”, señaló. “Son los primeros egresados con estos nuevos planes de estudios”, insistió.

“Son más de 800 sueños que se cumplen y se culminan hoy aquí en Villa Mercedes. Y más de 2.800 en toda la provincia. Lo que han logrado es gigante, hemos transformado un plan de estudio donde terminaron esos cursos cortos que tenía la UPrO, de uno o dos meses, y hemos empezado a generar la exigencia en los docentes para que tengamos mejores egresados”, agregó.

Por último, agradeció a las familias que llenaron las instalaciones esta tarde, por acompañar “a cada uno de nuestros egresados durante todo este año, o estos dos años, por las horas de ausencia de alguna madre, de algún padre, que le han dedicado a la universidad para formarse”.

Sol Ballesteros, egresada de Producción de Contenido Digital habló en nombre de sus compañeros y de todos los que con emoción recibieron su diploma: “Más allá de quién saca mejores fotos, quién edita más rápido o quién diseña mejor, quiero hablar de los desafíos personales que cada uno tuvo que atravesar. Porque en este mundo creativo, donde todo es tan subjetivo, y donde lo que para uno es una obra de arte, para otro es un simple, ‘está bueno’. Es muy fácil caer en la duda de si es realmente soy bueno o solo sé la teoría. Creo que ese fue nuestro mayor obstáculo, confiar en lo que hacemos”.

Agradeció a los profesores que transmitieron su pasión “desde un lugar tan humano que te da ganas de intentarlo una vez más”.

Poggi acompañó el acto de colación de la UPrO.

“Cada uno descubrió su camino, su potencial y ese espacio del mundo digital donde realmente brillan. Pero lo vivido no quedó solo en las aulas, se convirtieron en experiencias reales. En streaming, aunque ya no fui parte, marcó un antes y un después para la carrera. Fue una muestra de todo lo que aprendíamos, que no era todo solo teoría. Podíamos impactar afuera en un proyecto real con resultados reales”, señaló.

Dijo que en su caso tuvo la oportunidad de vivir una pasantía en la empresa “Cimientos” donde conoció profesionales “increíbles pero sobre todo personas gigantes”.

“Gracias UPrO por abrir las puertas que ni sabía que existían. Gracias Cimientos por darme un espacio real para crecer, equivocarme, aprender y avanzar”, completó. Y no se olvidó de agradecer a su hijo Álvaro: “A veces se quedaba llorando cuando yo venía a cursar, ese dolorcito también fue mi motor. Este año aprendí algo, no existe la edad perfecta para empezar, no importa si trabajás, si maternás, si no te alcanza el tiempo o si aprendés a los saltos, lo importante es dar el paso, incluso aunque te llene de miedos. Nunca es tarde para empezar, nunca es temprano para soñar en grande. El futuro no depende de lo que pasó, sino de lo que te animás a construir desde ahora”.