EL GOBERNADOR POGGI LE ACEPTÓ LA RENUNCIA AL JUEZ HUGO SAÁ PETRINO QUE SE VA ENVUELTO EN UN ESCÁNDALO
El camarista formalizó hoy la presentación de su dimisión al cargo ante el jefe de Estado provincial.
El gobernador, Claudio Poggi le aceptó hoy la renuncia al juez del Colegio de Jueces en lo Penal de la Primera Circunscripcion Judicial, Hugo Saá Petrino, según pudo confirmar El Chorrillero.
“Luego de transitar más de 26 años de actividad en el Poder Judicial, razones de índole estrictamente personales motivan y justifican mi alejamiento del ejercicio de la judicatura para poder avocarme en el desarrollo y tránsito de la abogacía, como un nuevo camino y desafío profesional y personal”, expuso el magistrado en el texto al cual tuvo acceso este medio.
Saá Petrino presentó la renuncia con vigencia a partir del próximo 30 de abril.
Escandalosa salida
En los últimos tiempos Saá Petrino fue noticia por los sucesivos acontecimientos bochornosos que protagonizó.
En diciembre salió a luz que en su condición de presidente del Colegio de Magistrados había librado cheques que rebotaron por falta de fondos.
Saá Petrino se manejó como máxima autoridad de la entidad con discrecionalidad y durante el Gobierno de Alberto Rodríguez Saá actuaba como si gozara de inmunidad. Ante sus pares no daba explicaciones y tampoco se le exigía que rindiera cuentas.
Recién a fin de año dentro del Colegio de Magistrados empezaron algunos jueces a tomar distancia y de hecho renunciaron a la comisión directiva cuando se destapó el escándalo de la plata.
Hasta ese momento, inclusive, se negaba a abrir los libros.
Un hecho personal lo volvió a exponer públicamente en junio. Le embargaron el sueldo porque nunca le pagó unos 36 mil dólares a un acreedor. Después de años esta causa tuvo resolución.
En septiembre fue removido de la conducción del Colegio de Magistrados porque volvió a emitir cheques sin fondos. Esta vez sus pares dieron un paso más y ordenaron una auditoría con el compromiso de poner a consideración de un fiscal el resultado de la investigación.
El final se acercaba porque ya no se sostenía.

